Donald Trump triunfó sobre Kamala Harris, del Partido Demócrata, en las elecciones presidenciales de Estados Unidos de 2024, lo que supone su segunda permanencia en el cargo más alto del país.
La victoria de Trump quedó sellada al obtener 277 votos electorales el miércoles 6 de noviembre de 2024, alrededor de las 5:30 a.m. hora local (5:30 p.m. WIB). Para el jueves 7 de noviembre, a las 5:21 a.m. WIB, Trump se había asegurado 265 votos electorales, mientras que Harris tenía 226.
El umbral de votos electorales en EE.UU. para asegurar la victoria es de 270.
Además, Trump se hizo con el voto popular, acumulando 72.083.871 votos (51%), frente a los 67.274.910 (48%) de Kamala.
Trump superó la barrera de los 270 votos tras imponerse en Wisconsin, un estado decisivo, con 49%. También mantuvo la ventaja en otros estados decisivos, como Arizona, Michigan, Nevada, Georgia, Carolina del Norte y Pensilvania.
"Hemos hecho historia esta noche por una razón", declaró Trump ante sus exultantes seguidores, según recoge CNBC International.
"La razón es que hemos superado obstáculos inimaginables para cualquiera", añadió, dirigiéndose a su enfervorizada multitud.
Implicaciones para Indonesia
Reflexionando sobre la administración anterior de Trump (enero de 2017 - enero de 2021), el Índice Compuesto de Yakarta (IHSG) exhibió un crecimiento constante.
Los datos de Refinitiv muestran que a finales de enero de 2017, el IHSG cerró en 5.294, subiendo a 5.862 a finales de enero de 2021, lo que representa un aumento de 10,73% en cuatro años.
Movimientos IHSG
La trayectoria del IHSG se consolidó en gran medida en ese periodo de cuatro años.
Desde principios de 2017 hasta principios de 2020, el índice se mantuvo relativamente estático, antes de experimentar una fuerte caída en marzo de 2020 debido a la pandemia del COVID-19. Sin embargo, durante el segundo semestre de 2020 hasta enero de 2021, el IHSG repuntó en medio de diversos sentimientos del mercado.
Mientras tanto, la rupia se depreció 5,04%, pasando de 13.347 IDR por USD a 14.020 IDR por USD en el mismo periodo.
Movimientos de rupias
Esta depreciación coincidió con las políticas de Trump, lo que se tradujo en un debilitamiento del índice del dólar estadounidense (DXY), que bajó 8,97%, de 99,51 a 90,58.
Trump aplicó estas políticas para reforzar la competitividad de los productos estadounidenses en el mercado mundial y aumentar así las exportaciones.
En cuanto al índice de precios de consumo (IPC), parece probable que la economía estadounidense mantenga la estabilidad, con un posible repunte de la producción de petróleo, que podría aumentar la oferta y provocar un descenso de los precios del crudo. Sin embargo, una segunda fase de la guerra comercial entre EE.UU. y China podría avivar la inflación, elevando el coste de los bienes.
En consecuencia, los recortes de los tipos de interés de la Reserva Federal estadounidense podrían encontrar resistencia, lo que dificultaría a los bancos centrales de todo el mundo, incluido el Banco de Indonesia (BI), ejecutar reducciones sustanciales de los tipos.
Las exportaciones de Indonesia a EE UU durante la era Trump
Bajo el mandato de Trump, las exportaciones de Indonesia a Estados Unidos aumentaron en 15,3%, pasando de 16.140 millones de USD en 2016 a 18.620 millones de USD a finales de 2020. Este crecimiento superó el aumento de 8.52% registrado en los últimos cuatro años de la administración de Barack Obama.
Políticas arancelarias de Trump
A lo largo de su campaña, Trump hizo hincapié en su intención de aumentar los aranceles comerciales, especialmente a China. Katrina Ell, directora de investigación económica de Moody's Analytics, señaló que las políticas comerciales de Trump podrían afectar negativamente a Asia, dada su postura proteccionista y sus promesas de imponer aranceles más agresivos a las importaciones estadounidenses.
El enfoque aislacionista de Trump en política exterior también suscita dudas sobre su compromiso de defender a Taiwán de una posible agresión china.
Una cuestión crítica para Indonesia es si Trump modificará los aranceles comerciales sobre las importaciones indonesias.
A mediados de 2018, Estados Unidos bajo el mandato de Trump revisó la elegibilidad de Indonesia para el Sistema Generalizado de Preferencias (SGP), un programa que permite el acceso libre de aranceles para bienes de países en desarrollo, lo que potencialmente contribuye al superávit comercial de Indonesia de aproximadamente 9.500 millones de dólares con Estados Unidos.
En aquel momento se examinaban 124 productos y sectores, entre ellos la madera contrachapada, el algodón y las gambas.
Tres riesgos en los mercados financieros
El gobernador del Banco de Indonesia, Perry Warjiyo, identificó tres áreas críticas a vigilar si gana Trump. Entre ellas, la presión sobre la rupia, la posible tensión sobre los flujos de capital y el aumento de la volatilidad de los mercados financieros.
Warjiyo afirmó que una presidencia renovada de Trump podría fortalecer el dólar estadounidense, impulsado por la tendencia al alza de la Fed Fund Rate, la tasa de interés del banco central de Estados Unidos.
"El dólar se fortalecerá, los tipos de interés estadounidenses seguirán altos y la guerra comercial continuará inevitablemente", explicó Perry durante una sesión con la Comisión XI de la Cámara de Representantes en Yakarta el miércoles 6 de noviembre.
Es probable que esta dinámica afecte a economías emergentes como Indonesia. La rupia podría sufrir presiones de depreciación, mientras que las entradas de capital extranjero podrían reducirse aún más.
"Estos acontecimientos afectarán a todos los mercados emergentes, incluida Indonesia, especialmente en términos de presión sobre los tipos de cambio, volatilidad de los flujos de capital y aumento de la incertidumbre en los mercados financieros", explicó.
Para mitigar los riesgos potenciales de la victoria de Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos, Perry dijo que el Banco de Indonesia, junto con el gobierno y el Comité de Estabilidad del Sistema Financiero (KSSK), mantiene su compromiso de mantener la estabilidad económica y del mercado financiero, al tiempo que apoya el crecimiento económico.
"Debemos responder con cautela, y el Banco de Indonesia seguirá dando prioridad a la estabilidad al tiempo que trabaja en estrecha colaboración con el Gobierno y el KSSK para apoyar el crecimiento económico sostenible", subrayó Perry durante la sesión con la Comisión XI de la Cámara de Representantes en Yakarta.
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